Estados Unidos

Un panorama desolador para las mujeres en EE.UU.

DOS AÑOS SIN ROE VS. WADE

Paula Escalada Medrano/ Agencia Efe

Se cumplieron dos años desde que el Tribunal Supremo de Estados Unidos anuló la sentencia Roe vs. Wade, que protegía el aborto a nivel nacional. Abortar se ha convertido en una odisea para millones de mujeres debido a las restrictivas normas aprobadas en muchos estados, lo que también complica la vida de médicos y abogados. Desde que el Tribunal Supremo, de mayoría conservadora, eliminó la protección existente desde 1973, decenas de estados han implementado legislaciones restrictivas.

En 14 estados es imposible abortar o el límite es de seis semanas, cuando muchas mujeres aún no saben que están embarazadas. En otros siete estados, se han impuesto impedimentos adicionales y reducido los plazos. En la mayoría de estos 21 estados, no hay excepciones ni por violación ni por incesto, y solo se permite el aborto cuando la vida de la madre está en peligro. Esta situación tiene aterrados a los médicos, quienes pueden enfrentarse a penas de hasta 99 años de prisión por practicar un aborto.

El Fondo de Defensa Legal para el Acceso al Aborto, creado por el Centro Nacional de Derecho de la Mujer, es una de las organizaciones que ha surgido tras el fin de Roe vs. Wade para apoyar a los demandados, muchos de los cuales son médicos, una profesión especialmente afectada. Jennifer Klein, directora del Comité de Políticas de Género de la Casa Blanca y asesora del presidente Joe Biden, ha destacado que muchos médicos no pueden soportar la presión y “abandonan sus estados”.

En riesgo 27 millones de mujeres

Más de 27 millones de mujeres en edad reproductiva viven en los 21 estados con leyes restrictivas, según afirma Klein. Esto equivale a “una de cada tres mujeres en edad reproductiva” en el país. “El impacto es devastador”, sostiene. A miles de mujeres se les rechaza en las salas de emergencia o deben viajar cientos de millas para recibir atención. Las más afectadas son las latinas y mujeres de origen afroamericano.

Datos del Center for American Progress señalan que los tiempos de viaje para acceder a un aborto se han multiplicado por 300 en los últimos dos años, y el tiempo promedio de conducción pasó de 33 minutos a dos horas y 12 minutos. En estados como Florida, la situación se agrava aún más, con tiempos de viaje que han aumentado de 22 minutos a nueve horas y ocho minutos.

¿Baja el número de abortos?

Lo paradójico es que el número de abortos no ha disminuido, sino que ha aumentado. En 2023, hubo más de un millón de abortos, la tasa más alta en más de una década y un 10% más que en 2020, según el Instituto Guttmacher. Esto se debe, en parte, al aumento del uso de medicamentos abortivos (mifepristona y misoprostol) en lugar de la cirugía. Jennifer Klein asegura que los jueces conservadores y los políticos extremistas del Partido Republicano no representan el verdadero pensamiento de los ciudadanos.

“Una gran mayoría del pueblo estadounidense cree que el aborto debería seguir siendo legal, independientemente de sus propias creencias” y de sus inclinaciones políticas. Por ello, el aborto está llamado a ser uno de los grandes temas de la campaña presidencial de noviembre. los antiabortistas y republicanos extremos piden hacer más y se han marcado un nuevo objetivo que avisa de que lo peor podría estar por venir: prohibir la píldora abortiva.