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WASHINGTON NO DEBE CONTENERLOS
Por Judy Pino
Portavoz y asesora en temas hispanos para Independent Women (iwf.org) y The LIBRE Initiative (belibre.org), que tiene un capítulo activo en Colorado.
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En todo el país, y aquí en Colorado, las empresarias latinas están transformando el panorama de los negocios en Estados Unidos. Estamos creando empresas a un ritmo seis veces superior al promedio nacional, aportando miles de millones a la economía, generando empleos y fortaleciendo comunidades. Pero ahora, nuestro progreso y el futuro económico de millones de familias Latinas está en riesgo.
Si el Congreso no extiende la Ley de Recortes de Impuestos y Empleos de 2017 (TCJA), se activará el mayor aumento de impuestos en la historia de Estados Unidos. El año que viene, una familia promedio de cuatro personas en Colorado tendrá que pagar $3,661 adicionales en impuestos. Lamentablemente, los primeros en sentir el golpe serán los emprendedores y las familias trabajadoras.
Somos nosotros quienes menos podemos permitírselo. Más impuestos, menos oportunidades y mayores costos podrían detener uno de los movimientos económicos más dinámicos de nuestra era. Nosotras, las empresarias latinas, como todos los estadounidenses, ya están luchando contra una inflación histórica. La inflación de la era Biden ha disparado los precios a niveles altísimos.
Tomar en cuenta lo que piensan las mujeres
Las familias y las empresas están pagando en promedio $1,000 más al mes en necesidades básicas como gasolina, alimentos y alquiler. Aumentar los impuestos en este momento agravaría aún más un entorno económico ya brutal. Estas preocupaciones son ampliamente compartidas. El 73% de los votantes latinos creen que sus impuestos son demasiado altos, y el 93% se preocuparía si subieran aún más.
Del mismo modo, el 78% de las mujeres opina que el Congreso debería extender los recortes de impuestos de 2017 para evitar subidas. La expiración de la TCJA aumentaría los impuestos a los ingresos en todos los niveles. Por ejemplo, una pequeña empresaria latina que gane $41,140 vería aumentar sus impuestos en casi $1,500, lo que representa un recorte del 3.4% a sus ingresos netos.
Un hogar hispano con ingresos de $65,540 podría enfrentar un aumento de impuestos de $1,242. Estas cifras no son solo números: representan el costo del cuidado infantil, los suministros para iniciar un negocio o la contratación de un nuevo empleado. Y no se trata solo del impuesto sobre la renta. Si suben los impuestos corporativos, también aumentan los costos de hacer negocios.
Aprender de los resultados de 2017
Los emprendedores enfrentarán precios más altos de los proveedores, mayores costos operativos y más dificultades para competir con grandes empresas o compañías extranjeras. Aumentar los impuestos corporativos no afectará tanto a los grandes magnates como a las pequeñas empresarias latinas, que ya luchan por pagar su nómina y mantener vivo su Sueño Americano.
Nosotras, las empresarias latinas de Colorado, no necesitamos ayudas gubernamentales. Necesitamos que el gobierno no se interponga. Requerimos un entorno fiscal justo y estable para enfocarnos en lo que mejor hacemos: innovar, construir y fortalecer la economía. Los resultados hablan por sí solos. El desempleo alcanzó su nivel más bajo en 50 años, los salarios subieron en todos los sectores y el crecimiento del PIB superó las expectativas.
Después de aprobarse la Ley de Recortes de Impuestos y Empleos en 2017, la economía estadounidense floreció. Se crearon casi cinco millones de empleos en poco más de dos años. El desempleo cayó a su nivel más bajo en medio siglo, los salarios aumentaron en todos los sectores, los ingresos medios de las familias estadounidenses alcanzaron máximos históricos, y el crecimiento del PIB superó las previsiones en $4 billones adicionales.

Pedimos al senado que actúe
Incluso los ingresos fiscales federales superaron las proyecciones en $2.7 billones durante la primera década de la TCJA, a pesar de los pronósticos pesimistas. En resumen, los recortes de impuestos funcionaron. Por eso, extender los recortes debe ser la máxima prioridad del Congreso. La buena noticia es que la Cámara de Representantes ya aprobó una legislación para extender los recortes de impuestos de 2017, pero ahora es el Senado quien debe actuar.
Las familias y emprendedores de Colorado sentirán el impacto si el Senado no actúa. Las empresarias latinas merecen algo mejor —y el país también. No pedimos un trato especial. Pedimos justicia: la oportunidad de crecer, contratar y prosperar sin que Washington cambie las reglas a mitad de camino. Si permitimos que estos recortes expiren, no solo nos enfrentamos a facturas más altas, estamos arriesgando la columna vertebral misma de nuestra economía.
El Senado debe actuar ahora para proteger el Sueño Americano de la próxima generación de creadores de empleo, innovadores y constructores. La elección es simple: empoderar a las empresarias latinas para que sigan impulsando nuestra economía o frenarlas con más impuestos y menos oportunidades. Elijamos el crecimiento. Elijamos la libertad. Extendamos los recortes de impuestos y mantengamos vivo el Sueño Americano.
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