El cambio de chip de Facundo Campazzo en la NBA

Foto/ EFE

GANA PROTAGONISMO CON LOS DENVER NUGGETS

Por Abel Flores @amantesdeldeporte2020 

El fichaje de la temporada para los Denver Nuggets fue la adquisición desde el Real Madrid del argentino Facundo Campazzo. Esta jugador por fin cumplió su sueño de jugar en la NBA, mejor baloncesto del mundo. Pero en el baloncesto como en la vida lo más importante no es llegar, sino mantenerse.

Los primeros días de “Facu” en la NBA no fueron tan fáciles como se cree. Es una liga muy diferente; con jugadores también muy diferentes en estilos de juego y en actitudes físicas. Aunque Campazzo estaba acostumbrado a jugar en alta competencia europea y olimpiadas, la NBA es el gran reto de su carrera.

El baloncesto internacional tiende a ser más táctico, pero menos explosivo; es más lento y estático, en cambio la NBA es velocidad, fuerza y ataque. Los partidos de la NBA casi siempre superan los 100 puntos por equipo, pero en el baloncesto internacional no tantas veces algún equipo llega a la centena de anotaciones.

Los obstáculos del Cordobés

 

Además de la adaptación a una nueva liga, Campazzo debe adaptarse también a jugar en la “Milla Alta”, es decir a la altura de la ciudad de Denver, ubicada a los pies de las Montañas Rocosas. La altitud es un factor determinante en la actividad aeróbica de un atleta, comprobado por la ciencia.

 

El otro gran obstáculo del cordobés llega desde la cabeza de su propio equipo. Me refiero a su entrenador el estadounidense Michael Malone, quien ve el baloncesto bajo una óptica de transiciones rápidas, velocidad y sobretodo que defender bien es tan o más importante como el atacar.

 

En otras palabras, Campazzo no solo se tiene que adaptar a la NBA, sino que en su quinteto los parámetros de la NBA son más que exaltados según lo que quiere el entrenador de sus jugadores. Curiosamente no solo la altura de la ciudad ha sido probablemente un reto para “Facu”.

 

La altura promedio de los Denver Nuggets también se ha convertido en un factor determinante en los minutos que puede jugar, porque los denverianos no son de los quintetos más altos de la NBA, como tampoco el base titular, el canadiense Jamal Murray, es tan alto. Entonces cuando Murray y Campazzo juegan juntos el equipo pierde altura y esto en la NBA se paga caro.

Facu es un pequeño gigante

A pesar de todos los obstáculos mencionados, Campazzo llegó a la NBA para triunfar y nadie dijo, y él lo sabe muy bien, que el éxito es fácil en la mejor liga del mundo. Con el paso de las semanas y superando alguna lesión leve, Campazzo ha ganado minutos y protagonismo en los últimos partidos.

El punto de inflexión ocurrió el 16 de febrero cuando los Nuggets visitaron a los Boston Celtics. Aunque el equipo perdió 112-99, Facundo tuvo uno de sus mejores partidos anotando 15 puntos, con 3 rebotes y 8 asistencias en 40 minutos jugados, la máxima cantidad de tiempo jugado por ahora.

Desde aquel partido en Boston, Campazzo jugó en los seis partidos siguientes sumando 163 minutos y promediando 27 minutos en cancha por juego. Lo más importante es que el argentino ha empezado a jugar un baloncesto estadounidense. Busca lanzar sin mirar el reloj, es directo en las transiciones y marca uno contra uno con la intensidad que lo caracteriza.

Según declaraciones del propio Campazzo la gran diferencia del baloncesto en la NBA es el talento y potencia física de cada jugador. Este hecho obliga a marcarlos con “las manos arriba”, porque son tan buenos que te pueden “sacar” faltas y pueden lanzar o penetrar hacia el aro en cuestión de milésimas de segundo.

Campazzo cambió de dieta para triunfar

En la previa de los Juegos Olímpicos Londres 2012, durante un entrenamiento de la selección albiceleste, el cordobés se sacó la camiseta y su compañero y capitán Emmanuel Ginobili no lo perdonó, aunque lo dijo a modo de chiste: “Es la primera vez que veo un base de 20 años con un poco de panza”, disparó “Manu”, haciendo reír a todos.

Desde ese entonces “Facu” cambió su dieta hasta el día de hoy. “Cuando estoy en el hotel se me complica, pero normalmente si sigo la dieta. Me tomo un café o unos mates y me voy a entrenar. Regreso y almuerzo, estoy toda la tarde con las chicas y a la noche ceno y ya está”, afirmó Campazzo sobre su dieta especial de tan solo dos comidas por día y mucho líquido.

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