EE. UU. acusa por terrorismo a primer miembro del Tren de Aragua

DETENIDO EN COLOMBIA| José Enrique Martínez Flores, conocido como “Chuqui”, sería extraditado para enfrentar juicio en EEUU. (Foto/TDCJ)

“CHUQUI” DETENIDO EN COLOMBIA ENFRENTA PROCESO JUDICIAL EN TEXAS

Redacción El Comercio de Colorado

José Enrique Martínez Flores, conocido como “Chuqui”, fue arrestado en Bogotá el 31 de marzo de 2025 en una operación conjunta entre la Policía Nacional de Colombia y agencias estadounidenses, incluyendo el Buró Federal de Investigaciones (FBI) y la Administración para el Control de Drogas (DEA). La detención del ciudadano venezolano de 24 años marca un hito en la lucha contra el crimen organizado transnacional.

Se trata del primer miembro del Tren de Aragua acusado formalmente de terrorismo por la justicia de Estados Unidos, luego de que dicha organización fuera catalogada como grupo terrorista por el Departamento de Estado en febrero de este año. Martínez Flores permanece bajo custodia de las autoridades colombianas, mientras se llevan a cabo los procedimientos legales para su extradición a los Estados Unidos.

Orden de captura de Corte Federal de Texas

Su arresto respondió a una orden de captura provisional emitida por una corte federal en el Distrito Sur de Texas, donde se le imputan cinco cargos relacionados con terrorismo y tráfico internacional de drogas. De acuerdo con la acusación, “Chuqui” formaría parte del círculo de liderazgo del Tren de Aragua en Bogotá y habría coordinado actividades logísticas y financieras de la organización en Colombia con miras a su expansión en Estados Unidos.

El Departamento de Justicia (DOJ) estadounidense sostiene que Martínez Flores conspiró para brindar apoyo material a una organización terrorista extranjera, en este caso el Tren de Aragua, y que facilitó efectivamente ese apoyo mediante el envío de personal —incluyéndose a sí mismo— y servicios destinados a fortalecer las operaciones del grupo. Además, se le acusa de haber organizado la entrega de al menos cinco kilogramos de cocaína desde Colombia hacia EEUU.

Según las autoridades, las ganancias de ese tráfico fueron utilizadas para financiar las actividades criminales del Tren de Aragua, lo que refuerza la acusación de que esta organización opera como una red estructurada de narcotráfico y terrorismo. El fiscal del caso, junto con la fiscalía del Distrito Sur de Texas, advierte que Martínez Flores podría enfrentar una condena máxima de cadena perpetua y una multa de hasta 10 millones de dólares si es hallado culpable.

Grupo de Trabajo Conjunto Vulcan

La acusación es parte de la estrategia “Operation Take Back America”, iniciativa federal que busca combatir la inmigración ilegal, eliminar organizaciones criminales transnacionales y proteger a las comunidades estadounidenses. El caso está siendo gestionado por el Grupo de Trabajo Conjunto Vulcan (JTFV), una unidad interinstitucional del DOJ creada para perseguir a la pandilla MS-13 y que desde 2024 ha ampliado su enfoque hacia el Tren de Aragua.

Según la fiscal general de EEUU, Pamela Bondi, esta acusación representa “un punto de inflexión” en la política de seguridad nacional. “El Tren de Aragua no es una pandilla callejera. Es una organización terrorista estructurada que echó raíces en nuestro país durante la administración anterior”, señaló. Bondi destacó que el caso demuestra que el gobierno de EEUU está dispuesto a utilizar todas las herramientas legales para desmantelar estas redes criminales.

Por su parte, el director del FBI, Kash Patel, declaró que el Tren de Aragua representa “una amenaza directa a la seguridad nacional” y prometió que su agencia continuará trabajando con socios internacionales para eliminar a esta organización de las calles estadounidenses.

Colaboración internacional

En las últimas semanas, las autoridades en Bogotá han imputado a otros presuntos integrantes del Tren de Aragua por delitos como homicidio, extorsión y tráfico de estupefacientes. La organización extendió sus tentáculos hacia Colombia, Perú, Chile y Brasil. Su presencia en Estados Unidos ha sido documentada en estados como Texas, Florida, Nueva York y Colorado, lo que ha encendido las alarmas entre agencias de seguridad nacionales.

De confirmarse su rol de liderazgo dentro del Tren de Aragua, Martínez Flores pasaría a ser uno de los primeros altos mandos de esta estructura en enfrentar un proceso judicial en el extranjero por delitos de terrorismo, lo que abre la puerta a una nueva etapa en la cooperación judicial y de seguridad entre Estados Unidos y América Latina.

La participación de la fiscalía general de Colombia, así como de las agencias federales estadounidenses, subraya el carácter transnacional de esta causa y refuerza la importancia de la cooperación internacional en la lucha contra el crimen organizado. El resultado de este proceso podría sentar un precedente importante para casos similares en el futuro, y redefinir el enfoque global hacia el combate de estas organizaciones criminales de carácter trasnacional.