LA MEDIDA REQUIERE UNA SEGUNDA DISCUSIÓN Y LA APROBACIÓN LA ALCALDESA DE LA CIUDAD
Redacción El Comercio de Colorado
El ayuntamiento de Los Ángeles aprobó una ordenanza que declara a la ciudad como “ciudad santuario”, prohibiendo el uso de recursos municipales para la aplicación de leyes migratorias federales y restringiendo el intercambio de información sobre inmigrantes sin estatus legal con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
La decisión, tomada por unanimidad, posiciona a Los Ángeles junto a otras ciudades de Estados Unidos que han adoptado medidas similares en defensa de las comunidades inmigrantes. Aunque el término “ciudad santuario” no tiene un reconocimiento legal formal, simboliza un compromiso de brindar refugio y apoyo a los inmigrantes, permitiéndoles denunciar delitos sin temor a represalias migratorias.
Un mensaje claro de protección
El concejal Hugo Soto-Martínez, quien presentó la propuesta, subrayó la urgencia de la medida ante las promesas del presidente electo Donald Trump de iniciar deportaciones masivas al asumir el cargo en enero. “La ciudad de Los Ángeles no cooperará con el ICE de ninguna manera”, aseguró Soto-Martínez. Este concejal destacó que muchas personas necesitan sentirse protegidas para confiar en su gobierno.
Aunque la ordenanza ahora requiere una segunda votación formal, la alcaldesa Karen Bass ya expresó su respaldo a la medida, lo que refuerza su implementación. A pesar del impacto simbólico de la ordenanza, la ciudad de Los Ángeles ya tenía políticas de no cooperación con autoridades migratorias federales. Sin embargo, este paso formaliza ese compromiso en un momento crítico para los inmigrantes.
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