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Impulsando la libertad y el progreso
Por Ángel Merlos
Director de Estrategia del Instituto Libre-Colorado
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Con el final oficial de la emergencia por el Covid-19, todavía hay muchas preguntas sin respuesta sobre cómo los líderes gubernamentales y nuestros funcionarios de salud pública manejaron la crisis. La Cámara de Representantes de los Estados Unidos incluso ha establecido un comité especial para resolver todo eso.
No necesitamos un comité especial para saber que muchos de los problemas durante la emergencia de salud fueron causados por leyes y regulaciones obsoletas de interferencia del gobierno en la atención médica. Las cosas comenzaron a mejorar durante la pandemia una vez que los gobiernos federal, estatal y local comenzaron a renunciar a las reglas sobre cosas como telesalud, kits de prueba, leyes que limitan las camas de hospital y permiten que los profesionales de la salud trabajen a través de las fronteras estatales.
Los beneficios de la opción personal
Incluso en tiempos normales, este tipo de barreras socavan la capacidad del sistema de salud para brindar atención. No tiene que ser así. Hay un mejor camino a seguir: la opción personal. El cuidado de la salud estadounidense es demasiado costoso, con demasiado papeleo y demasiadas facturas sorpresa.
Una toma de control total de la salud por parte del gobierno, como el “Medicare para todos”, solo empeoraría las cosas y permitiría que los intereses especiales jugaran con el sistema. Hay muchas cosas buenas en la atención médica estadounidense, por lo que, en lugar de construir un nuevo sistema desde cero, debemos mantener lo que funciona y arreglar lo que no.
Una opción personal es el plan respaldado por un médico que ofrece más flexibilidad y confía en que usted tomará sus propias decisiones. Usted debe determinar cuál plan de seguro contratar; cuáles médicos quiere ver; y cuáles nuevas terapias quiere tener acceso. Se trata de recibir atención médica personalizada y asequible.
Promover las cuentas de ahorro para la salud
Por ejemplo, las cuentas de ahorro para la salud (HSA) son cuentas libres de impuestos que los titulares pueden usar para gastos médicos. Una encuesta reciente mostró que el 93 por ciento de los que tienen una HSA están satisfechos con ella. Reglas del gobierno limitan quienes puede tener una por ese motivo a nueve de cada diez estadounidenses se les niega el acceso a esta opción para ahorrar dinero.
Con una opción personal, todos los estadounidenses que deseen una HSA podrían tener una. La opción personal brinda una mejor atención médica al eliminar las barreras que le impiden ver a los médicos en los que confía. Este sistema aumenta la competencia para que el paciente pague menos y amplía las opciones de cobertura que hacen que la atención médica sea menos complicada.
Buscan la asequibilidad, la confiabilidad y las opciones
Algunos le dirán que necesitamos que el gobierno se haga cargo por completo de la atención de la salud. Incluso aseguro que de esa forma sería gratuito. Los hispanos sabemos que la atención médica del gobierno solo conduciría a impuestos más altos, costos más altos, más burocracia y racionamiento de la atención. Muchos de nosotros vinimos aquí para escapar del tipo de control gubernamental total que encontramos en los países que dejamos atrás.
Con un precio de 32 billones de dólares, una toma de control del cuidado de la salud por parte del gobierno no puede dar a los estadounidenses lo que merecen: asequibilidad, confiabilidad y opciones. En su lugar, los legisladores deberían respaldar una opción personal que amplíe las opciones, reduzca los costos y les dé a los estadounidenses control sobre su atención.
A reinventar la atención médica
Este es el resultado final: todos los estadounidenses deberían poder obtener la atención médica que necesitan y cuando la necesitan. Y debido a que la atención médica es tan personal, todos deberían poder elegir la cobertura adecuada para ellos, independientemente de sus ingresos.
No estamos atrapados en el estado de cosas actual. Podemos arreglar esto. Pero no dupliquemos el mismo pensamiento que nos tomó desprevenidos durante la crisis del Covid-19. Ahora es el momento de trabajar juntos para reinventar la atención médica con una opción personal.
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