Miles esperan por su asilo a la intemperie

CIUDAD JUÁREZ ALBERGA HASTA 80 MIL MIGRANTES DESDE ENERO 2019

Redacción El Comercio de Colorado

Decenas de miles de migrantes están residenciados por obligación, desde hace meses, en la peligrosa frontera entre México y Estados Unidos. Ellos tienen que esperar resultar favorecidos de una revisión favorable de su solicitud de asilo.  Todas estas personas fueron trasladadas a México desde que comenzó a aplicarse el programa “Remain in México” (Quédate en México) hace un año.

El nombre formal de esta política es Protocolo de Protección a Migrantes (MPP) y permite al Gobierno estadounidense regresar a ciertos solicitantes de asilo a México. El programa fue aceptado por la administración de Lopez Obrador alegando “razones humanitarias”. Sin embargo, la llegada de estos migrantes ha agudizado las tensiones en Ciudad Juárez que es tristemente conocida por la violencia.

Testimonio

La situación de estos migrantes se ha vuelto desoladora. Yamileth Ramírez viajó hace seis meses desde Honduras hasta Texas. Fue trasladada a Ciudad Juárez mientras le asignaban una cita de una corte migratoria que ha de decidir si se le otorga asilo en los Estados Unidos. “Yo le digo al presidente de Estados Unidos que por favor nos dé una esperanza. Y no estar esperando aquí sufriendo, aguantando tantos meses en balde”, dijo Ramírez.

Esta migrante continuó con su petición. “Que [Trump] nos dé la oportunidad o alguna esperanza para que podamos seguir esperando”, dijo la hondureña. Ramírez recuerda la triste realidad que le obligó a marcharse de su país de origen. Ella además expresa que siente frustración por los complicados procesos que forman parte de las solicitudes de asilo en los EEUU. “Creo que no he recibido un trato justo por parte de las autoridades de EEUU”, insistió.

Critica de los expertos

Aunque el Gobierno mexicano firmó a mediados de junio de 2019 un convenio con varias maquiladoras en Chihuahua para ofrecer hasta 40.000 empleos a migrantes, la realidad en esta ciudad fronteriza dista mucho de ser favorable para este colectivo tan vulnerable. Iván Jiménez, director del albergue Leona Vicario de Ciudad Juárez, que atiende a un centenar de migrantes, calificó el programa “Permanecer en México” de “deshumanizante”.

“Hay familias que van a cumplir un año en su proceso de asilo porque asistieron a una cita ante un juez, que te dedica dos minutos, y te da cita para dentro de dos, tres y cuatro meses”, dijo. En este sentido, el director ejecutivo de Human Rights Watch en América Latina, José Miguel Vivanco, tachó de situación “completamente anómala” el que un “número importantísimo de personas” -que él elevó hasta 80.000- estén en la frontera norte.

“Es una zona del país de alto riesgo, de una fuerte presencia de cárteles, donde hay unos grados de inseguridad absolutamente patentes. Creemos que es una política que está en contradicción con estándares en materia de refugio”, concluyó el experto. Mientras prosigue esta política, en Ciudad Juárez, que en estas fechas puede registrar temperaturas cercanas a los 0 grados, los inmigrantes viven en condiciones precarias e incluso en la intemperie.