Madre de 8 hijos obtiene asilo

POR CASO DE VIOLENCIA DOMÉSTICA

Redacción El Comercio de Colorado

Una madre guatemalteca de ocho hijos recibió asilo en los Estados Unidos como víctima de abuso doméstico. Julia Margarita Tomas, de 34 años, logró demostrar que su vida estaría en peligro si regresaba a su país después de repetidas amenazas de muerte por parte de su esposo. “Me dijo que un día tenía que volver a Guatemala y que vería lo que me iba a pasar. Siempre me amenazó y me golpeó con un machete, todo delante de mis hijos”, dijo.

Ella dijo que logró escapar en 2016 con su hijo Juan de cinco años. La protección de inmigración también se aplica a sus otros siete hijos que permanecieron en Guatemala. El abogado de inmigración Alex Gálvez, quien representó a Tomás, dijo: “Es un gran logro porque este puede ser uno de los últimos casos aprobados bajo el argumento de violencia doméstica vivida en el país de origen”.

Los obstáculos

La administración de Trump ha tratado de restringir el asilo otorgado a las víctimas de abuso doméstico y violencia de pandillas. En 2018, el entonces fiscal general Jeff Sessions intervino en un caso después de que un juez de inmigración había otorgado protección a un salvadoreño que fue víctima de violencia doméstica. La Junta de Apelaciones de Inmigración dictaminó que la víctima había sufrido abusos durante años y calificado para el asilo, una decisión que allanó el camino para docenas de peticiones similares.

Sessions se opuso al fallo y dijo que el hecho de que algunos países tengan problemas para lidiar con delitos como el abuso doméstico o la violencia de pandillas no se puede utilizar para establecer el asilo. La decisión llegó a la corte federal y en diciembre de 2018, el juez Emmet Sullivan rechazó los cambios realizados por el fiscal general y ordenó el regreso de los migrantes que habían sido deportados bajo la nueva política de la administración Trump.

Beneficio para los hijos

El caso fue llevado a los tribunales de apelaciones de los Estados Unidos en 2019, donde aún se está discutiendo. Gálvez dijo que el caso de Tomás es “una prueba de que las víctimas de violencia doméstica tienen casos creíbles” y agregó que sería difícil revertir la decisión. Tomás dijo que lo más importante para ella es que sus hijos podrán unirse a ella desde San Marcos, en la región suroeste de Guatemala.