Denver albergará migrantes solo por 14 días

CAPITAL DE COLORADO OTORGARÁ CONTRATOS PARA ATENDER MIGRANTES

Redacción El Comercio de Colorado

La ciudad de Denver se vio obligado a reducir los servicios para los migrantes que llegan desde Texas al no poder satisfacer ese “ritmo implacable”. Según el Departamento de Servicios Humanos de Denver (DDHS), los albergues municipales pasaron de alojar a principios de septiembre a 980 inmigrantes llegados desde Texas a alojar 2.689 inmigrantes en la actualidad. Estas es la “tercera oleada de inmigrantes” desde la de diciembre y la de mayo de 2022.

El DDHS informa que cada día llegan a Denver de cuatro a doce autobuses con inmigrantes. El lunes 2 de octubre llegaron nueve con unos 300 inmigrantes. Esta cantidad se suma a otros 500 que arribaron entre el 30 de septiembre y el 1 de octubre. “No tenemos el personal necesario y contamos con suficiente espacio de alojamiento,” explicó Jon Ewing, portavoz del DDHS.

Familias reciben ayudas por 37 días

Ewing anunció que el tiempo de ayuda a los nuevos inmigrantes se reducirá de 21 días a 14 días como máximo. Los administradores se han fijado la meta de llegar a situación en la cual la mayoría de los recién llegados dejen los albergues municipales no más de cuatro días después de llegar. La medida, dijo Ewing, no afectará a las familias con hijos menores de edad que lleguen juntas, quienes seguirán recibiendo ayuda por hasta 37 días.

“A estos inmigrantes no se les pregunta sin quieren o no venir a Denver. Simplemente los envían”, aseveró el portavoz en referencia directa al gobernador Greg Abbott. Según datos oficiales, desde diciembre pasado Denver asistió con alojamiento y comidas a casi 22.000 inmigrantes y proveyó pasajes de autobús a 1.900 de ellos que decidieron trasladarse a otras ciudades.

Déficit presupuestario

El costo total de los servicios prestados por Denver a los inmigrantes supera los 23 millones de dólares. Mientras, el presupuesto anual de Denver de ayuda a inmigrantes era de solo 2,5 millones a principios de año y se esperaba gastar no más de 11 millones en 2023. Con la expectativa de cubrir el déficit, desde el 1 de septiembre el DDHS habilitó un centro de donaciones para recibir contribuciones en efectivo para el Fondo de Recién Llegados.

Al mismo tiempo esa oficina del gobierno de la ciudad invita a las personas a donar elementos de uso personal y especialmente ropa de abrigo para el invierno. Esta solicitud de la ciudad parece que no ha tenido efecto y su alcance ha sido limitado. Ewing asegura que esas donaciones, aunque necesarias y apreciadas, “ya no son suficientes”. Las presiones presupuestarias llevaron a la nueva administración a tomar decisiones a largo plazo.

Transferir la atención de migrantes a contratistas

La administración del alcalde Mike Johnston abrió una licitación para otorgar contratos para la recepción, el alojamiento y la prestación de los servicios de comida para los migrantes. También están licitando los servicios de transporte e iniciativas para guiar a los migrantes en su integración a la sociedad y la economía norteamericana. En la licitación, que cierra el 13 de octubre, pueden participar empresas privadas y organizaciones comunitarias.

Para el 18 de octubre, la ciudad va a notificarle a los licitantes que han escogido para moverse a una segunda fase del proceso. Esa esa nueva etapa debe presentar sus presupuestos y afrontar una entrevista con funcionarios de la ciudad. Los ganadores de los diferentes proyectos licitados serán conocidos en la primera semana de noviembre 2023. De esta manera Johnston opta por atender migrantes otorgando contratos a pequeñas organizaciones.

Fallido intento de crear un mega centro para migrantes

El documento que la ciudad presentó a los interesados en licitar indica que buscan pequeñas organizaciones comunitarias locales, con preferencia que sean organizaciones no lucrativas, para ejecutar contratos de tamaño pequeño que puedan manejar. Es idea de contratos pequeños contrasta con el fallido proyecto que el alcalde Michael Hancock presentó ante la cámara municipal a finales de abril. Hancock retiró su iniciativa la primera semana de mayo.

El anterior alcalde buscaba otorgar un contrato por 30 millones de dólares a una sola empresa, GardaWorld. Esa empresa se iba a encargar de la recepción y atención de los nuevos migrantes en un mega centro para albergar hasta 2 mil personas. La selección de la empresa fue cuestionada por activistas locales de derechos humanos. Al mismo tiempo, estos activistas y otros expertos cuestionaron el enfoque de centralizar la atención un solo lugar.