Estados Unidos

Elon Musk quiere su propio reino en Texas

CON CIUDAD PROPIA| Starbase como el reino de Elon Musk. (Imagen generada por AI)

BUSCA CONVERTIR STARBASE EN UNA CIUDAD Y REFORZAR SU INFLUENCIA

Redacción El Comercio de Colorado

Elon Musk, conocido por su ambición desmedida y su capacidad de acumular riqueza e influencia, ha dado un paso más hacia su sueño de convertirse en un auténtico “rey sol”. En una carta dirigida a un juez del condado de Cameron, Texas, Musk solicitó formalmente una consulta pública para transformar Starbase, la base de operaciones de SpaceX en Boca Chica, en un municipio oficial. Este proyecto refleja su intención de crear su propio reino, donde las reglas se alineen con sus objetivos y visión.

Starbase, localizada estratégicamente cerca del Golfo de México y la frontera con México, ya opera como un enclave casi autónomo. Musk asegura que su inversión en infraestructura, generación de empleos y contribución fiscal al condado son razones suficientes para legitimar su propuesta. “Queremos convertir el sur de Texas en la puerta de entrada a Marte”, afirmó Musk, destacando el potencial económico y tecnológico que su proyecto puede traer a la región.

La propuesta de Musk incluye dotar a Starbase con instalaciones de clase mundial, desde escuelas y centros médicos hasta una infraestructura que permita a la comunidad prosperar. Actualmente, SpaceX asume responsabilidades propias de un gobierno local, como el mantenimiento de carreteras y servicios básicos. Musk subraya que su compromiso con el medio ambiente no cambiará, incluso con la transición a un modelo de gobernanza municipal.

Alineado con Greg Abbott

El empresario sudafricano y nacionalizado americano ya había mostrado su preferencia por Texas al trasladar allí tanto la sede de Tesla como su residencia personal, abandonando California, un estado que ha criticado repetidamente. En Texas, Musk encuentra un entorno fiscal favorable, sin impuestos estatales sobre la renta y con un gobierno alineado con sus ideales, liderado por el republicano Greg Abbott.

La idea de Musk de tener su propio municipio plantea preguntas sobre las implicaciones de otorgarle tanto poder. Si logra su objetivo, Starbase podría convertirse en un modelo inédito de ciudad corporativa, planteando debates sobre la concentración de riqueza y autoridad en manos privadas. Mientras tanto, Musk continúa acumulando riqueza, influencia política y poder geopolítico, consolidándose como una de las figuras más disruptivas y controvertidas de nuestro tiempo.