COMPENSACIÓN| Las familias de los desplazados de Auraria podrán avanzar en su educación. (Foto/EFE)
ATORGADAS POR CU-DENVER, MSU-DENVER Y EL CCD
Redacción El Comercio de Colorado
Los descendientes de miles de familias latinas de Denver desplazados a la fuerza de sus hogares para dar lugar al Campus Universitario Auraria recibirán ahora becas. Este desplazamiento tuvo lugar hace medio siglo como consecuencia de la construcción de las instalaciones para la Universidad de Colorado en Denver (CU-Denver); la actual Metro State University (MSU); y el Community College of Denver (CCD). Estas mismas universidades serán las que otorguen las becas a personas de origen hispano.
La iniciativa, conocida como Programa de Becas para Residentes de Auraria Desplazados (DASP), comenzó a gestionarse desde hace décadas. Sin embargo, apenas ahora, a medio siglo de la expropiación y demolición de 36 manzanas del barrio latino, el beneficio de las becas se extiende a las familias que vivieron allí de 1955 a 1973. De esa manera, “todos los descendientes directos” de las familias afectadas “son elegibles a perpetuidad para estudios de pregrado y posgrado” en las tres universidades que ahora ocupan CU-Denver, MSU y CCD.
La historia
Esos tres centros de estudios superiores han otorgado becas a los descendientes hispanos desde la década de 1990. Hasta ahora esas becas únicamente cubrían parcialmente los estudios universitarios y sólo de destinaban a algunas familias desplazadas. Estas becas solamente incluían a los hijos de los dueños de las propiedades expropiadas. Cuando Auraria fue fundada en 1848, al terminó la Guerra Mexicoestadounidense, Auraria era una ciudad independiente al sur del río Platte, rivalizando a Denver, al norte del río.
Los fundadores de Auraria eligieron ese nombre relacionado con “oro” en latín porque allí llegaban mineros para buscar oro en la zona y luego, oro y plata en las Montañas Rocosas. En aquella época, el extremo sur de Auraria estaba cerca del llamado Pozo de los Mexicanos, una mina de oro ahora inexistente que mexicanos operaron durante siglos. A partir de 1920, como resultado de la Revolución Mexicana, Auraria, que para ese momento ya era un vecindario de Denver, se convirtió en un barrio hispano.
Demolición
Luego, una inundación causada por el río Platte en 1965, causó serios daños en el barrio, llevando eventualmente a la decisión de las autoridades locales de demolerlo por completo. Pero la decisión no fue comunicada a los residentes hasta 1969, cuando se ordenó la demolición de casas de madera o ladrillos que ya no podían ser reparadas. En 1972, esa orden se amplió para incluir todas las 330 casas y los 250 negocios del vecindario. La demolición terminó en 1976.
Sólo quedaron excluidas unas pocas casas y la Iglesia San Cayetano, que dejó de ser un templo para convertirse en centro comunitario. “La vida de la comunidad hispanoparlante de Auraria giraba en torno a esa iglesia. Ese era el lugar de las reuniones semanales, el lugar de los amigos y el sitio para ver crecer a los niños”, expresó la historiadora Magdalena Gallegos en un documento publicado por la Biblioteca Pública de Denver.
Los beneficiarios
Según datos oficiales, durante los últimos 25 años la Universidad de Colorado en Denver ha otorgado becas a unos 150 estudiantes de familias desplazadas. Por su parte, el Colegio Comunitario de Denver entregó becas a otros 120 estudiantes, y la Universidad Estatal Metropolitana de Denver a unos 270. Colleen Walker, vocero de iniciativa, dijo que el programa de becas “honra el sacrificio de los residentes en Auraria y reconoce sus contribuciones para que la educación.
Displaced Aurarian Scholarship Program
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