octubre 17, 2024

¿Proyecto para autocracia en Estados Unidos?

¿Proyecto para autocracia en Estados Unidos?

Jesús Sánchez Meleán 

El Proyecto 2025, impulsado por la Fundación Heritage, es visto por expertos como una amenaza grave y extrema para la democracia estadounidense. Este plan indican que ha sido diseñado como una posible guía para un potencial segundo mandato de Donald Trump. Según ese borrador, un nuevo presidente norteamericano podrí usar la presidencia para sus propias venganzas personales y erosionar los principios fundamentales del sistema de controles y contrapesos que han sido la columna vertebral de la democracia en Estados Unidos.

El sistema de “checks and balances” ha sido crucial para evitar la concentración de poder en una sola rama del gobierno, asegurando que ninguna pueda dominar a las demás. Sin embargo, el Proyecto 2025 propone desmantelar este sistema, consolidando el poder en la Oficina Oval y reduciendo significativamente los recursos de las agencias gubernamentales, como el Departamento de Educación o de Justicia. Esto, según los críticos, no solo centralizaría el poder, sino que también debilitaría la capacidad de estas agencias para operar con efectividad.

Una de las propuestas más alarmantes del Proyecto 2025 consiste en explorer la capacidad de un nuevo jefe del poder ejecutivo de despedir a miles de funcionarios públicos y reemplazarlos con leales a su ideología, asegurando que su agenda o interés se implemente sin oposición. Este movimiento no solo socavaría la profesionalidad y la imparcialidad de los servidos públicos civiles, sino que también amenazaría con convertir a las instituciones gubernamentales en herramientas de una agenda autoritaria.

La reciente decisión de la Corte Suprema, dominada por jueces conservadores nombrados por Trump, de otorgar inmunidad penal al presidente, exacerba aún más las preocupaciones sobre el Proyecto 2025. Con esta inmunidad, un nuevo presidente en EEUU podría actuar sin temor a consecuencias legales, consolidando su poder y actuando por encima de la ley. Esto establece un peligroso precedente que, según los expertos, podría erosionar aún más el Estado de Derecho y la democracia estadounidense.

Resulta irónico y preocupante que, a pesar de haberse beneficiado claramente de las propuestas del Proyecto 2025, Trump se haya distanciado públicamente del plan. “No sé nada sobre el ‘Proyecto 2025’. No tengo ni idea de quién está detrás”, declaró recientemente. Esta negación no solo es poco convincente, sino que también subraya su disposición a decir cualquier cosa en su búsqueda de poder. Su desvinculación del proyecto parece ser un intento de atraer a votantes indecisos y moderados.

Jesús Sánchez Meleán

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