Frigoríficos de Colorado en la mira de las autoridades

GARANTIZAN ABASTECIMIENTO DE CARNE

Redacción El Comercio de Colorado

Los cuatro principales frigoríficos de Colorado se han mantenido productivos. Sin embargo, estas instalaciones industriales se encuentran trabajando a la mitad de su capacidad instalada. A los frigoríficos de Colorado se les hace imposible aumentar su producción en vista de la extensión de la epidemia del coronavirus entre sus trabajadores.

En la planta de JBS en Greeley se han confirmado 245 casos de coronavirus, con seis muertos, entre los 3.000 empleados. Menos menos de la tercera parte de los trabajadores han completado la prueba del coronavirus. Kim Córdova, presidente de UFCW Local 7, ha insistido en la necesidad de practicar los exámenes a todos los trabajadores activos en JBS.

También han sido confirmados 15 casos positivos de COVID-19 en el frigorífico de Cargill en Fort Morgan. Mientras, hay otros 19 casos en dos frigoríficos locales en los condados Weld-donde también se ubica JBS-, y Adams, vecino de Denver. Los frigoríficos ya están aplicando medidas de distancia social y tomando las temperaturas cada día a los trabajadores.

Habla la comisionada de salud

La situación de los frigoríficos locales obliga a pensar en una posible escasez de los productos cárnicos. Kate Greenberg, comisionada de agricultura de Colorado, confirmó que “están implementado medidas para respaldar a los productores agrícolas, a los trabajadores, al sistema de alimentos y a las partes interesadas no productoras”.

Greenberg aseveró que “el suministro de carne no está en peligro”, subrayando que el Departamento de Agricultura ha gestionado “recursos y acceso a equipo de protección personal y exámenes médicos” para los trabajadores agrícolas y para los empleados en plantas procesadoras de alimentos.

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