COMENZARÍA OPERACIONES DE FORMA INMEDIATA
Redacción El Comercio de Colorado
La planta empacadora de carne JBS en Greeley comenzará a operar después de que cerró debido a un brote de coronavirus. El Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de Colorado (CDPHE) ha dado el visto bueno para la reapertura después de que se implementó un plan de seguridad.
De ahora en adelante los trabajadores deben usar mascarillas mientras se encuentren dentro de la planta. Esas mascarillas van a ser proporcionadas por los administradores de JBS. La empresa también está obligada a proporcionar desinfectante para las manos y ubicar carteles advirtiendo sobre los riesgos del virus en todas las áreas de empresa.
Los representantes de JBS se han comprometido a compartir mensajes periódicos y de interés con todos los trabajadores. Y más importante, todos los mensajes que emita JBS deben estar en varios idiomas, incluido el español. Le empresas insiste en que los trabajadores entiendan la importancia del distanciamiento social tanto dentro de la empresa como fuera.
Protocolos
Por otra parte, las autoridades sanitarias, los representantes de la empresa, y los líderes sindicales acordaron el protocolo diario para ingreso a las instalaciones de la planta. Todos los empleados que regresen al trabajo se someterán a un proceso de selección de ingreso diario. A las personas se les tomara la temperatura. Esta evaluación tendrá lugar dos veces cada día.
JBS también ha trabajado con el Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional para desinfectar las instalaciones. El cierre de la empacadora se produjo luego de que en la segunda semana de abril falleciesen por COVID-19 dos empleados. Entre mediados de marzo y el día del cierre otros 800 empleados aproximadamente faltasen pidiendo días por enfermedad.
Tomaron decisiones
Ante esa situación, el gobernador de Colorado, Jared Polis, el Departamento de Agricultura estatal y las autoridades de salud del Condado Weld (donde está Greeley), en consulta con JBS, decidieron cerrar el frigorífico. La reapertura esta semana se realizará bajo el control del Gobierno estatal y de los funcionarios de salud del Condado Weld.
El frigorífico de JBSen Greeley exporta carne a 20 países y genera unos 2.000 millones de dólares de beneficios anuales para los productores de carne en Colorado y en otros estados con quienes hace negocios. la compañía mantendrá en la nómina a los empleados que dieron positivo por coronavirus, unos 50, según el comunicado de UFCW.
Opinan los líderes comunitarios
Los empleados, los grupos comunitarios y el sindicato que representa a los empleados expresaron su preocupación por la decisión de reabrir las instalaciones a raíz del brote. “Este es un problema de derechos humanos”, dijo el líder sindical Kim Cordova. “La vida de los trabajadores es importante, y no deben ser sacrificados”.
“Tienen miedo”, dijo Sylvia Martínez, portavoz de Latinos Unidos de Greeley, refiriéndose a los empleados con los que habló. “Sin embargo, tienen que ir a trabajar o ser despedidos, realmente no tienen otra opción”. Funcionarios de salud de Colorado ampliarán las pruebas a los residentes de Greeley y otras localidades del condado Weld.
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