noviembre 8, 2025

Cinco muertos en tiroteo en iglesia mormona de Michigan

TIRADOR FUE OFICIAL DE LA MARINA

Redacción Agencia Efe

La Policía de la localidad de Grand Blanc en Míchigan informó aumentaron a cuatro los muertos de un tiroteo ocurrido este domingo 28 de septiembre. El incidente ocurrió en una iglesia mormona y dejó además a ocho heridos. Las autoridades identificaron como autor del hecho a Thomas Jacob Sanford, que murió en un enfrentamiento con dos agentes.

Dos víctimas fueron encontradas en la iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días donde al momento del tiroteo “cientos de personas” atendían al servicio, según la Policía. En total, con la muerte del tirador, que era también de Míchigan, son cinco los muertos en la iglesia, según dijo el jefe de Policía de Grand Blanc, William Renye, en una rueda de prensa.

De acuerdo con Renye, dos de esos cuatro presentaban heridas de bala, señaló NBC.
Además, la Policía estatal informó que ha estado respondiendo a amenazas de bomba adicionales en diferentes lugares de la comunidad y que algunas ocurrieron en iglesias y fueron desestimadas.

Tirador era un veterano

Se informó además que el FBI lidera la investigación sobre el tiroteo “como un acto de violencia selectiva”. De acuerdo con las autoridades, el hombre, que usó un rifle de asalto, estuvo en la Marina entre junio de 2004 y junio de 2008, donde fue mecánico y alcanzó el rango de sargento.

También ha trascendido que durante su carrera militar Sanford, que era de la cercana localidad de Burton, recibió varios premios, entre ellos la Medalla de Buena Conducta de la Marina, la Medalla de la Campaña de Irak, la de Servicio en la Guerra Global contra el Terrorismo y la de Servicio de Defensa Nacional, destacó NBC.

Sanford chocó su automóvil contra la iglesia, tras lo cual abrió fuego y luego la prendió en llamas, incidente que ocurrió alrededor de las 10:20 de la mañana y a las 10.33 ya el tirador había sido neutralizado. Se informó además que en el lugar del tiroteo se encontraron unos tres dispositivos improvisados.

El presidente y la fiscal reaccionaron

Al poco de conocer lo sucedido, la fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, informó de que agentes del FBI se desplazaron al lugar de los hechos. “Tal violencia en un lugar de culto es desgarradora y escalofriante. Por favor, únanse a mí en orar por las víctimas de esta terrible tragedia”, añadió.

Por su parte, el presidente Donald Trump aseguró estar siguiendo la situación y condenó el ataque. “Esto parece ser otro ataque dirigido contra los cristianos en los Estados Unidos de América. La Administración Trump mantendrá informada a la opinión pública, como siempre hacemos. Mientras tanto, RECEN por las víctimas y sus familias. ¡ESTA EPIDEMIA DE VIOLENCIA EN NUESTRO PAÍS DEBE TERMINAR, DE INMEDIATO!”, dijo.