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31 mil hispanos perderán sus viviendas en 2023

EN DENVER| Un 41 por ciento de las personas actualmente en situación de calle perdieron sus viviendas en 2023. (Foto/Cortesía Colorado News Connection)

DRÁSTICO AUMENTO DE DESALOJOS AFECTA A RESIDENTES DE DENVER

Redacción El Comercio de Colorado

El rápido aumento en el número de desalojos en Denver, con cifras solo comparables a las de la recesión de 2008, afecta a decenas de miles de latinos. Muchos de los que han sido desalojados de sus viviendas son inquilinos. Estas personas por distintas razones no pueden pagar la renta. Sin embargo, una cantidad no menor, son propietarios de vivienda ya no pueden realizar los pagos mensuales correspondientes para mantener sus viviendas, revela el reporte.

El informe, difundido por el Departamento de Asuntos Locales de Colorado, a cargo de la materia relacionada con las viviendas, indica que durante los últimos 12 meses la cantidad de desalojos en Denver creció un 60 por ciento. Como comparación, en el resto del estado ese aumento fue de solo el 8,5 por ciento. Ya se registraron 9.200 desalojos en Denver en 2023, anticipándose un total de 12.000 al terminar el año, superando el promedio de 2009 a 2019.

Aunque no existe información específica actualizada sobre el número de hispanos desalojados, la Coalición Contra el Desamparo en Colorado (CCH) afirma en un reciente reporte que los latinos han sido “desproporcionadamente afectados” por los desalojos en Denver. Por separado, la Coalición Nacional de Viviendas de Bajos Ingresos (NLIHC) estima, usando datos de la Oficina del Censo, que de 23.000 a 31.000 hispanos perderían sus viviendas en Denver este año, representando hasta el 48 por ciento de los inquilinos desalojados.

Desalojo de los García

Entre los latinos con orden de desalojo figuran Pedro García y su esposa María, ambos de Guatemala. Ellos tienen dos décadas siendo residentes de Denver. Los García perdieron su negocio durante la pandemia y aunque ambos trabajan de tiempo completo, sus salarios son bajos. Hace un año dejaron de pagar la hipoteca de su casa. Ellos van a ser desalojados a finales de octubre, si no hay alguna acción inesperada. “Durante la pandemia nos dieron mucha ayuda, pero ahora esa ayuda se terminó”, contó Pedro.

Este guatemalteco siguió, “quizá podríamos haber hecho las cosas mejor. Quizá tendríamos que haber controlado nuestros gastos. Pero lo cierto es que ahora no tenemos para pagarle al banco ni para rentar una casa”. Pedro ya está pensando en regresarse a su país natal. La otra opción, a la que su esposa se opone, dijo, es coordinar con otras “dos o tres familias” el alquiler de una vivienda en la que habitualmente viviría una sola familia. Los García tienen pocos días para decidir porque su caso de desalojo sigue su curso.

Desalojados y desamparados

Por su parte, Mike Johnston, el alcalde de Denver, afirmó que la ciudad está buscando “llenar el vacío” creado por la finalización de la ayuda que el Gobierno federal otorgó a inquilinos y propietarios por la pandemia. Pero advirtió que los fondos que se obtengan serán “una fracción” de los montos necesarios para responder a la crisis de viviendas en la ciudad.

La concejal Serena Gonzales Gutiérrez y tres de sus colegas en el concejo de Denver impulsaron una medida para agregar 17,5 millones de dólares al presupuesto local de ayuda a los desamparados. Esta normativa asume la correlación entre desalojos y desamparo. Según Gonzales Gutiérrez, el 41 por ciento de las personas actualmente en situación de calle en Denver perdieron sus viviendas este año.