Irán ejecuta en público otro manifestante

AHORACAMIENTOS EN PÚBLICO| Irán sigue ejecutando manisfestanes.(Foto/EFE)

UNA 28 PERSONAS SERÁN CONDENADOS A LA HORCA

Redacción El Comercio de Colorado

Las autoridades iraníes ejecutaron en público a un segundo preso condenado por su participación en las protestas que sacuden el país. Irán ha desafiado la ola de críticas internacionales tras el ahorcamiento del primer manifestante. Majid Reza Rahnavard fue ahorcado en público en la ciudad santa de Mashad (noreste) después de que fuese sentenciado a muerte por el asesinato de dos agentes de seguridad, informó la agencia Mizan, del Poder Judicial.

“Fue sentenciado a muerte por “guerra contra dios” por acuchillar hasta la muerte a dos miembros de las fuerzas de seguridad”, explicó Mizan, que añadió que además hirió supuestamente a otras cuatro personas. El joven fue arrestado el 19 de noviembre, acusado el 24 y su juicio se celebró el 29. Ese mismo día fue condenado a muerte, después de supuestamente confesar sus crímenes, según Mizan. Los defensores de derechos humanos objetan estos procedimientos judiciales expeditos.

Otros nueve presos han sido condenados a muerte por las protestas. Según Amnistía Internacional al menos 28 acusados podrían ser condenados a la horca. La ejecución de Rahnavard se produce cuatro días después del primer ahorcamiento de un preso condenado por participar en las protestas desatadas por la muerte de Mahsa Amini a mediados de septiembre. Mohsen Shekari, de 23 años, fue ejecutado por herir a un basiji -miliciano islámico- con un cuchillo, bloquear una calle y crear terror en Teherán.

Irán ejecuta en público otro manifestante

Nuevas sanciones de la UE

Esa ejecución provocó una oleada de condenas internacionales, especialmente desde países occidentales, que han pedido a Irán que ponga fin a los ahorcamientos. La Unión Europa prevé dar luz verde a nuevas sanciones contra responsables iraníes de violaciones de los derechos humanos, tras criticar duramente la ejecución de Shekari. El alto comisionado para los derechos humanos de la ONU, Volker , consideró que la ejecución del joven tenía como objetivo asustar a los manifestantes.

“Claramente esto tiene el propósito de crear temor para el resto de los manifestantes”, sostuvo en una rueda de prensa Türk. A pesar de ello la ejecución ha provocado nuevas protestas en el país, con marchas en silencio y con velas en numerosas ciudades de la nación persa para condenar el ahorcamiento. Las revueltas comenzaron por la muerte de la joven kurda de 22 años Masha Amini, tras ser detenida por la Policía de la moral por no llevar bien colocado el velo.

Pero, las protestas han evolucionado. Ahora se observa que los manifestantes piden el fin de la República Islámica fundada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979. En los casi tres meses de protestas han muerto más de 400 personas y al menos hay 15.000 detenidos, según la ONG Iran Human Rights, con sede en Oslo. Irán es uno de los principales países del mundo en la aplicación de la pena de muerte, con 314 ejecuciones llevadas a cabo en 314, según Amnistía Internacional.