Prevenga la miopía en sus hijos - El Comercio de Colorado

PRACTÍQUELE UN EXAMEN DE LOS OJOS

Por Esteban Sandoval, optometrista

La miopía entre los niños ha aumentado rápidamente durante décadas. Sin embargo, los padres y cuidadores malinterpretan ampliamente los riesgos y el tratamiento. La prevención y la detección temprana de la miopía son dos claves para controlar esta epidemia que afecta la visión, el desarrollo y el aprendizaje de los niños en el aula.

¿Qué es la miopía?

La miopía es una afección de la visión que afecta la capacidad de un niño para ver objetos a distancia porque la forma del globo ocular es demasiado larga o la córnea está demasiado curvada. La miopía no es una enfermedad ocular, sino una imperfección en el ojo conocida como error de refracción.

La afección generalmente comienza en la infancia y a menudo progresa con el tiempo a medida que el niño crece. Aproximadamente, en la actualidad el 41 por ciento de los estadounidenses son miopes en comparación con el 25 por ciento en 1971.1 Esta tendencia ascendente existe en todo Colorado y en todo el mundo.

Detección temprana y progresión lenta

Los optometristas coinciden en que la mejor manera de retrasar la progresión de la miopía y posiblemente prevenirla incluye una combinación de exámenes de la vista completos y consistentes para niños incluso sin síntomas. Los niños deben someterse a un examen de los ojos por parte de un oculista a los 12 meses, 3 años, 5 años de edad y luego cada año para los niños de bajo riesgo.

Estos exámenes regulares le dan a su hijo la mejor oportunidad de detección temprana y tratamiento para retardar o corregir la miopía. Por otro lado, se ha demostrado que el tiempo diario al aire libre retrasa la aparición de la miopía. Algo muy importante, los padres debe esforzarse por minimizar el tiempo frente a la pantalla, ya que esto se ha relacionado con un aumento en la progresión.

Si uno o ambos padres son miopes, su hijo corre un mayor riesgo. Es posible prevenir esa propensión; pero, la progresión de la afección a menudo puede ralentizarse con la detección y el tratamiento adecuado.