Estados Unidos

Escuelas de Texas en problemas para contar con agentes armados

NUEVA LEY RESPONDE A MASACRE EN UBALDE| La ley que exige presencia de agentes armados en todos las escuelas de Texas enfrenta desafios. (Foto/EFE)

LES ASIGNAN 15 MIL DÓLARES ANUALES PARA PAGAR AGENTES

Redacción El Comercio de Colorado

La entrada en vigor de una nueva ley en Texas que exige la presencia de agentes armados en todas las escuelas ha generado dificultades de implementación en todo el estado. Esta medida, que se ha adoptado en respuesta a los recurrentes tiroteos en el país y en Texas, se ha topado con la cruda realidad de la falta de recursos y personal en muchas comunidades escolares.

La nueva disposición legal, que fue impulsada por el gobernador republicano Greg Abbott, requiere que todas las escuelas públicas de Texas cuenten con agentes armados en sus instalaciones. Sin embargo, a medida que los distritos escolares más grandes del estado reabren sus aulas, cumplir con este requisito no ha sido tan sencillo como parece.

Texas cuenta con casi 9,000 escuelas públicas, lo que convierte esta disposición en la más grande de su tipo en los Estados Unidos. A pesar de las buenas intenciones, los recursos financieros asignados para cumplir con esta nueva normativa resultan insuficientes en muchos casos.

Son 15 mil dólares por escuela al año

Los distritos escolares más grandes, que incluyen áreas urbanas densamente pobladas y comunidades más rurales, están luchando para cumplir con los requisitos de la ley. La asignación de aproximadamente 15 mil dólares por campus otorgada por el gobierno estatal está lejos de ser suficiente para cubrir los costos asociados.

Con esos recursos se debe hacer efectiva no solo la contratación. También, deben usarse fondos para realizar el entrenamiento de los agentes adicionales y para crear los procedimientos para el desempeño de los agentes.

Además, esta disposición ha expuesto las limitaciones de los llamados a desplegar guardias armados en todas las escuelas. A pesar de los esfuerzos de más de una década por parte de la Asociación Nacional del Rifle (NRA) para promover esta idea, la realidad de su implementación es más compleja de lo que se pensaba.

Pocos maestros quieren portar armas

Un problema adicional es la distribución de agentes armados en las escuelas primarias, donde su presencia suele ser menos común. Aunque estos campus han recibido órdenes de aumentar la seguridad después de tiroteos escolares, es difícil encontrar suficientes oficiales disponibles y entrenados para cubrir estas áreas.

Ante las limitaciones del monto de recursos asignados, a algunos distritos escolares a buscar soluciones poco convencionales, como recurrir a empresas de seguridad privada o incluso armar al personal y a los maestros. Hasta el momento, menos del 10 por ciento de los educadores han aceptados se entrenados para portar armas.

La falta de claridad en cuanto al cumplimiento de esta disposición también es un problema. Aunque la nueva ley permite excepciones, no obliga a los distritos escolares a informar si cumplen o no con los requisitos. Esto dificulta la evaluación del nivel de cumplimiento en todo el estado.